jueves, 11 de marzo de 2010

Ejercicio de análisis de un cuento


En nuestro diagnóstico vamos a leer y analizar un cuento. Se trata de "Las últimas miradas" de Enrique Anderson Imbert.

La idea es que puedas trabajar el texto y elaborar un escrito donde expongas tu opinión y análisis.


¿A qué le prestamos atención cuando leemos Literatura?

¿Cuál es la intención de lo Literario?

¿Por qué prestarle atención a los puntos de vista del narrador?

¿Qué podemos investigar que ayude a la comprensión del cuento?

Estas y todas las preguntas que quieras, podrán ayudarte a organizar el contenido de tu escrito.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta muy bueno.

Anónimo dijo...

Ya retirado de la actividad docente, Enrique Anderson Imbert continuó con su pasión por la escritura, incursionando en los géneros más diversos. Todos los años regresaba durante unos meses a Buenos Aires, donde falleció a finales del año 2000. En su lecho de muerte bosquejó un cuento corto: la historia de un violinista que, a punto de comenzar un concierto que definirá su carrera, descubre que ha olvidado la partitura. Durante toda su vida reivindicó su adhesión al socialismo.
Son reputados sus ensayos sobre la historia literaria hispanoamericana. (Historia de la literatura hispanoamericana, 1954; Spanish American Literature - A History, en 2 volúmenes, 1963; El realismo mágico y otros ensayos, 1979; La crítica literaria y sus otros métodos, 1979; Mentiras y mentirosos en el mundo de las letras, 1992), y sus estudios sobre Domingo Faustino Sarmiento y Rubén Darío. Es también autor de novelas y de libros de cuentos (El Grimorio, 1961; La locura juega al ajedrez, 1971; Los primeros cuentos del mundo, 1978; Anti-Story: an anthology of experimental fiction, 1971; Imperial Messages, 1976).

Lautaro (5B)

Anónimo dijo...

Análisis del texto “las ultimas miradas”
El narrador comienza a contarnos la historia de manera confusa porque no da datos precisos de lo que nos quieren contar. El mismo tiene oraciones cortas lo que nos acelera la lectura, lo que nos permite descubrir el desenlace con menor dificultad.
El texto cuenta la historia de un hombre que asesina a su mujer por una supuesta infidelidad.
“…mira dos sillas enfrentadas que parecen estar discutiendo ¡todavía!” denota una previa discusión antes del asesinato… “…algunas parejas desaparecen debajo de un cuadro que reproduce LOS AMANTES de Picasso… “loqe nos da a entender la supuesta infidelidad; “…pero mas allá, donde el marco de la puerta corta un costado del papel, muchos pastorcitos se quedan solos, sin sus compañeras…” en esta cita podemos comprender que tomo la decisión de matarla
Cuando el narrador dice: “el hombre mira a su alrededor. Entra en el baño. Se lava las manos. El jabón huele a violetas. Cuando ajusta la cañilla, el agua sigue goteando. Se seca. Coloca la toalla en el lado izquierdo del toallero: el derecho es el de la mujer. Cierra la puerta del baño, para no oír el goteo. Otra vez en el dormitorio. Se pone una camisa limpia: es de puño francés…” Algunas de estas citas son ejemplos de la última observación que da él a su casa y lo que en ella se encontraba, “hay que buscar los gemelos” que se usaban en ocasiones especiales, como en este caso lo era para él.
otro ejemplo puede ser “ se cruza a la acera de enfrente y antes de dirigirse hacia la comisaría mira la ventana de su propio dormitorio. Allí dentro ha dejado a su mujer con un puñal clavado en el corazón” parece retirarse muy desconcertado, pero no arrepentido de lo sucedido, solo le queda dar a conocer los hechos a la policía y entregarse.


Enrique Anderson Imbert (Córdoba (Argentina), 12 de febrero de 1910 - Buenos Aires, 6 de diciembre de 2000). Escritor, ensayista y profesor universitario argentino.
Biografía
Nació en Córdoba, Argentina, desde los cuatro años de edad vivió en Buenos Aires y desde los ocho en La Plata. Estudió en el Colegio Nacional de esa ciudad, y luego en la Universidad de Buenos Aires, a la que ingresó a los 18 años. Fue alumno de Pedro Henríquez Ureña en filología y de Alejandro Korn en filosofía. En 1930, comenzó a enseñar en la Universidad Nacional de Cuyo, y posteriormente, hasta 1947, en la Universidad Nacional de Tucumán. Al mismo tiempo, era editor de la sección literaria del periódico socialista "La Vanguardia" de Buenos Aires. Destituido de su cátedra en Tucumán con el advenimiento del gobierno de Juan Domingo Perón, se dirigió a los Estados Unidos con una beca de la Universidad de Columbia. El mismo año 1947 comenzó a enseñar en la Universidad de Míchigan, donde permanecería hasta 1965. En ese año fue designado Victor S. Thomas Professor de Literatura Hispánica en la Universidad de Harvard, cargo que mantendría hasta su jubilación en 1980. Fue elegido miembro de la Academia Argentina de Letras en 1979.